Es simple… jeje, un día viendo a mi segundo gran amor platónico por primera vez volando por los aires me di cuenta de que Dios hace cosas muy grandes, y en una de esas vi que si la verdadera fe la tenemos con nosotros mil cosas buenas podríamos hacer...
En fin así fue como lo conocí, en un accidente, y después Dios me lo puso en el camino, y aunque no estoy muy segura, creo que el también sintió algo raro no era amor, pero era como un sentimiento quizá de rareza digo el destino o Dios mismo suelen hacer muy raro este mundo, y.... coincidencia???
Tal vez las oraciones de ese día permitieron que le pudiera conocer o tal vez es una “casualidad”, digo el vivía por mi casa, y pues su trabajo estaba a tan solo unas calles de nuestras casas... aunque su comportamiento era poco inusual... digo, una novia de por medio... pero aun así, el tiempo siguió pasando, y yo también encontré a alguien q me lo quitara de la cabeza.... aunque sea por un tiempo, y el tiempo se hizo mas largo y su promesa se hizo menos alcanzable, y la vida muchos giros dio... y lo volví a ver... cuando ya lo había olvidado se apareció.... y estuvo conmigo, y en medio de su conciencia borrosa y un poco alcoholizada me recordó... y estuvo conmigo una vez mas... después de eso otra vez volví a olvidarlo, pero nunca deje de pedir por el en mis oraciones y sin ni siquiera pensarlo o imaginarmelo otra vez me lo volví a encontrar estuvo cerca de mi por un instante y me saludo y se volvió a acordar de mi...
Ahora el futuro es incierto y su presencia es más lejana de lo que parece... pero el destino y mi fe siguen haciendo de las suyas... y lo seguirán haciendo hasta que llegue el día en el que le aclare mis dudas... y le exponga el corazón a carne viva. Siento que ese será el día en el que deje de sufrir por amor y no porque vaya a ser correspondida, simplemente sabré en que he estado mal todo este tiempo y creo que él es una de las mayores razones del delirio al querer enamorarme...
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